
Supongo que debería de hablar de la Fontana di Trevi, de la capilla Sixtina, del Castillo de San Angelo, de la plaza Navona, del Pantheón o del Coliseo... pero... por un lado de esto está casi todo dicho y por otro de todos ellos solo deseo hablar del Colosseo, el monumento que más me ha emocionado e impresionado nunca.
La primera vez que lo vi, que llegue a él, fue mágica, inolvidable, muy deseada; en cambio la segunda, lo que más tuvo de especial fue la despedida, el verlo desaparecer ante mis ojos a medida que nos adentrábamos en la boca de metro del mismo nombre. Es un lugar que transmite, que más allá de sus milenarios muros esconde una esencia, un ser, un corazón forjado en las innumerables historias que habrá contemplado y que no hace sino transmitir sensaciones que, al menos a mí, ningún otro lugar nacido de la mano del hombre me haya contagiado.
Retornaría a él eternamente, volvería a hacerlo meta, razón de ser o motivo de culto un año sí y otro también. Divisarlo de nuevo tras esa curva en la plaza Venecia, sentirme mínimo ante él, admirar su inmensidad estando en su interior, recrearme viéndolo iluminado por la noche, correr por verlo de nuevo, voltearme lentamente una y otra vez antes de alejarme de él definitivamente como queriéndome decir "aprovecha, disfruta hasta el último segundo de su inmensidad"... Anfiteatro Flavio-Colosseo, tua fama crescit eundo.
Pero no puedo acabar esta entrada sin escribir sobre Monti, esa zona cercana a Cavour, uno de esos barrios que tanto me gustan. Con esencia, personalidad y vida propia. Un lugar de color sepia, crudo, adoquinado, de fachadas desconchadas y plantas trepadoras, de forja, piedra y madera, tranquilo y muy cercano al bullicio a la vez que alejado de él. Me encantó su Fontana di Catecumeni y ya no tanto por ella en sí o por la arquitectura del lugar, sino por la gente que la rodeaba y esa transmisión de toque indie, de gente más allá de lo superficial y más acá de lo irreal.
Roma, Monti, quisiera volver y dormir en ti, tras cenar en cualquiera de tus birrerias, tras dar dos pasos más allá y ver aparecer el Coliseo iluminado, tras dar dos pasas más acá y ver desaparecer el Coliseo iluminado.
No hay comentarios:
Publicar un comentario